El Adiestramiento

Nos dice la RAE que el adiestramiento consiste en la acción y efecto de adiestrar, llevado a cabo por el adiestrador, persona que adiestra haciendo diestro a su discípulo, en la tercera acepción de dicha palabra, es decir, hábil, experto en un arte u oficio.

Nos trae nuestra compañera Aurora un nuevo hallazgo datado de 1905 que hace referencia a un partido que tendrá lugar en Febrero entre el Club de football de Sevilla (el único) y el Recreativo de Huelva. Aquí tienen el recorte del diario La Provincia de Huelva fechado el 30-11-1905:

Algún mal pensado podría decir que esto demuestra que el Club de Football de Sevilla aún ni tan siquiera se había creado pues no habían tenido ni “tiempo de adiestrarse”. Nada más lejos de la realidad.

Esta partida a la que aluden desde Huelva es probablemente la misma a la que hacía alusión la prensa en este recorte del diario Sevilla datado el 12-09-1905 (más de dos meses antes), en el se dice textualmente “Hace tiempo en nuestra ciudad...”

Salta a la vista además, que la persona que escribe la nota en el diario La Provincia desconocía de la practica del Football en Sevilla, el cual como saben como ya se jugaba en 1890, como poco.

De esta perla periodística llaman la atención varias cosas, como por ejemplo nos apunta Carlos Romero. A mi me ha llamado la atención el Adiestramiento.

Como saben, el Recreativo de Huelva se reorganiza en 1903 y ya por esas fechas la nueva sabia del Recre habría comenzado a adiestrarse en los misterios del Football.

Parece que este análogo proceso de reorganización (Sevillanización diría yo) tiene lugar algo más tarde en Sevilla, entrando en 1905 nueva sabia sevillana a engrosar y rejuvenecer a la Sociedad de Football. Es claro que sus socios originarios ya no estaban para muchos trotes por lo que el proceso de renovación de los sportmens era necesario para dar vida a la Sociedad.

Para 1905 tal vez los Jiménez, Mejías o Zapata debían de estar menos adiestrados que los Landong o los Hammick, y sin duda menos aún que sus homólogos de Huelva, los cuales llevaban adiestrándose desde dos años antes, y en mi opinión, es a esto a lo que se refiere Gallegos (presidente, que no secretario como mal apunta el periodista) cuando pide algo más de tiempo para que se vayan adiestrando los últimos en llegar.

Y mi pregunta es: ¿Quién adiestraba a estos jóvenes?

¿Sería Macoll el encargado de hacerlo?, ¿Lo haría el Sr. White?, ¿Se imaginan a nuestro vicecónsul Johnston con su abrigo en la banda dando instrucciones a los chicos?

Poco a poco, piedra a piedra, perla a perla, el pasado se irá haciendo presente ante nuestros ojos. Apuesten por ello.