No depende de nosotros

Eso es lo que siento hoy. Mejor dicho, lo que lamento.

Pasear el nombre del Campeón Eterno de Andalucía por Europa no depende de nosotros.

No depende de nosotros como aficionados pues da igual rompernos la garganta en Nervión por nuestro escudo o recorrer cientos de kilómetros como peregrinos tras los apóstoles de nuestro sentimiento, porque si estos “apóstoles” deciden sestear y mirar hacia otro lado, nada podemos hacer nosotros.

No depende de nosotros como Club porque no tenemos la influencia que tienen otros clubes sobre los corruptos estamentos futbolísticos para manipular a su antojo.

No depende de nosotros como institución porque nos falta el respaldo, que otros siempre han tenido, de nuestros gobernantes locales para ayudarnos siempre a ser todo lo grandes que deberíamos ser.

Y por último y más importante, no depende de nosotros como equipo porque, permítanme ser pesimista, a día de hoy me parece que lo único que nos puede “salvar” es la necesidad de supervivencia que tendrá el Zaragoza en su partido ante el Espanyol, porque si el Zaragoza pierde ese partido, entonces…

…Entonces más que depender de nosotros dependeremos de que el Espanyol, con su estadio lleno y mordiendo por cada balón, consiga derrotar a un grupo de apáticos moribundos cuasi-ya derrotados, que estarán más pendientes de la hora a la que sale el vuelo que les llevará de vacaciones a alguna playa paradisíaca que de defender el escudo que llevan en el pecho.

Viéndolo así, mucho me temo que no depende de nosotros…

PD: Desde aquí dar la enhorabuena a todos los Barcelonistas residentes en Sevilla que ayer celebraban el título de liga haciendo sonar los cláxones de sus vehículos por la ciudad.

Eso sí, si pese a todo terminamos consiguiendo la UEFA precisamente en Barcelona, a ver si los andaluces allí residentes también hacen sonar sus cláxones por toda la diagonal. ¿Que menos no?